Significado e importancia de la coordinación de gremios
Ahora que comienza el buen tiempo, muchas comunidades de vecinos empiezan a organizar y a afrontar el tema de las piscinas: búsqueda de empresas que se encarguen de la limpieza y mantenimiento de piscinas comunitarias, presupuestos, elección… En Arreta Zerbitzuak somos expertos en limpieza de comunidades en Gipuzkoa y por eso te explicamos las pautas a seguir para mantener una piscina en perfecto estado y preparada para su uso.
Mantenimiento de piscinas comunitarias
1. Limpieza general de la piscina y sus bordes
Antes de comenzar a tratar el agua, es importante limpiar la superficie de la piscina. Podemos usar una pértiga con red cada día, para recoger las hojas o la suciedad que pueda estar flotando en el agua.
Aunque la mayoría de piscinas comunitarias llevan un aparato llamado ‘skimmer’, que se encarga de aspirar el agua y limpiar de forma automática la superficie de nuestra piscina, es importante darle una pasada con la pértiga.
Debemos también limpiar las paredes y el fondo con un cepillo manual o un limpiafondos, para evitar la formación de cal, algas y otras impurezas.
También es importante limpiar a diario durante el verano el borde de la piscina, ya que es un sitio por el que pisan muchos bañistas y, muchas veces, suele ser la parte más resbaladiza de la piscina. Para ello es necesario pasar un cepillo por toda la zona y posteriormente limpiarlo con agua.
2. Tratamiento del agua y medición del pH
Otra de las cosas más importantes para el mantenimiento de una piscina comunitaria en perfecto estado es la medición del pH del agua. De esta medición depende que no se formen algas dentro de la piscina o que no se vaya deteriorando con el paso del tiempo. El nivel de pH del agua ha de estar entre el 7 y el 7,8.
Hay muchos productos químicos que te ayudarán a la hora de limpiar una piscina comunitaria: electrólisis salina, oxígeno activo, anticales, fungididas, alguicidas, etc. Aunque si hay un elemento químico que no puede faltar en una piscina es el cloro.
3. Cloro: en su justa medida
Siguiente con lo que veníamos hablando del cloro, es necesario utilizarlo, pero es igual de importante seguir las indicaciones. La cantidad de cloro a utilizar en la piscina comunitaria depende de factores como el tamaño o la climatología (calor, lluvia, etc). La medida estándar es diluir, cada semana, unos 20 gramos de cloro por cada 15 metros cúbicos de agua.
Es vital mantenerse dentro de los niveles de pH.
4. Limpieza de filtros
Por último, para limpiar la piscina comunitaria, es necesario mantener limpia la bolsa del ‘skimmer’, para que el agua sucia pueda irse y circular el agua limpia.
Por otra parte, los filtros sucios de la depuradora provocan que la calidad del agua sea peor. Por eso es muy importante limpiarlos de forma periódica o cuando veamos que se llenan de suciedad o que el agua no sale filtrada como debería (las depuradoras más modernas te avisan de ello mediante sistemas digitales). También se recomienda cambiarlos cada cierto tiempo, dependiendo de si es un filtro de arena o de papel.
5. Mantenimiento periódico
Realizar un mantenimiento periódico de una piscina comunitaria durante todo el año nos evitará tener que realizar ese trabajo extra antes de la apertura de la temporada de baño. También alargará la vida útil de los materiales de la piscina y la conservará en las mejores condiciones.
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